España: el ‘hub’ de negocios digitales del Sur de Europa

«Entre enrutadores, aplicaciones y equipos de energía, explosionó mi España, la tierra del Cloud…». Vale, sí, nos pillan Leo Caerts y Leo Rozenstraten, los creadores del ya mítico Y viva España que han convertido en eterno desde el inmenso Manolo Escobar hasta el dios albino Heino —Heinz Georg Kramm para la familia—, y nos corren a gorrazos como poco por el desatino perpetrado con su ya mítica letra. ¡Ah! ¿No sabías, lector/a, que la compusieron dos belgas? Gran pueblo el belga, capaz de eso y de versionar temas fundamentales de la música brasileña con un conjunto llamado Two Man Sound. Sí, belgas cantando en portugués con aire brasileiro. Y dieron el pego, ahí es nada. Búscalo en YouTube. Ya verás, ya.

Pero lo que dice la estrofa con la que comienza este reportaje es totalmente cierto: España es la nueva tierra prometida para el Cloud. Un hub de primer orden para el desarrollo de negocios digitales. Y también Portugal, que no se nos olvide. En suma, la Península Ibérica.

Es así. Ambas naciones se han convertido en los últimos años en un punto de referencia clave a nivel internacional en cuanto al desarrollo de la economía digital. “Su posición estratégica es clave para convertirse en la autopista de información que une Europa con África, EE. UU. y Sudamérica con la menor latencia. Este último, es uno de los motivos principales por los que España se ha convertido en el país de moda para la construcción de centros de datos”, explica Zigor Gaubeca, director de Ingeniería y Tecnología de Grupo Aire.

“Además, por concretar un poco más, Madrid es un centro de negocios y de población cada vez más relevante en el actual mapa de conectividad mundial, que está recibiendo nuevos proveedores internacionales de servicios Cloud, colocation e interconexión”, apunta Nuria Yagüe, head of Partners and Alliances en Equinix, España y Portugal.

Y sin olvidar otros factores que han influido en proyectos de esta escala, como es la decisión de las grandes nubes públicas —Google Cloud, Microsoft Azure y Amazon Web Services— de despegar infraestructuras en Madrid para convertir España en el punto de conexión con EEUU y el continente africano. “Sumando la inversión de AWS en la creación de sus centros en Aragón, convierten al país en candidato ideal para convertirse en el próximo hub digital para el sur de Europa. A lo que se añade que Madrid se ha convertido en el foco de inversión, gracias a la situación geográfica, que la beneficia a la hora de atraer talento. Además, las condiciones de conectividad de las que goza el país son idóneas. Cabe señalar que Madrid representa una pieza fundamental en cuanto a infraestructura y energía”, como apunta Francisco Torres-Brizuela, director de Canal, Alianzas y Proveedores de Servicios Cloud de Iberoamérica.

Razones

Por qué, que preguntaría José Mourinho hasta la saciedad. Para empezar, España cuenta con una ubicación geográfica perfecta, buenas infraestructuras, suelo abundante, estabilidad sociopolítica, estamos dentro del marco legal europeo, tenemos un coste laboral competitivo y ofrecemos una gran capacidad innovadora. “Todo ello nos posiciona como el lugar idóneo para albergar centros de datos desde donde proveer tecnología Cloud”, reconoce Enrique Ruiz, director de la Región Cloud de Centros de Datos de Microsoft en España.

Claro que hay otra razón no menos importante, y es la nube, que está siendo clave en la recuperación económica tras el COVID-19, como así defiende Alfred Escala Sisquellas, Cloud Platform leader de IBM para España, Portugal, Grecia e Israel. En opinión de este especialista, la pandemia, sin duda, ha sido un acelerador de la adopción de la nube. “Ésta es esencial para impulsar otras como el Internet de las Cosas, la industria 4.0, así como para las administraciones públicas que manejan grandes cantidades de información, la aplicación del Big Data, la inteligencia artificial y la analítica de datos, entre otras. Todas estas tecnologías son clave para avanzar en la digitalización y la modernización de las comunidades y, en este sentido, y en medio del proceso de digitalización que se está viviendo actualmente, España tiene la posibilidad de emerger como una región atractiva para las inversiones en infraestructuras tecnológicas que sigan impulsando el cambio.

A lo que hay que añadir que, precisamente a causa de la pandemia, las posibilidades de deslocalización habilitan la posibilidad de que las personas puedan trabajar en un país y vivir en otro. “No se trata de que vengan a España a trabajar para España, sino que vienen a trabajar a España, pero para sus respectivos países. En este sentido, por ejemplo, sí que estamos viendo grandes movimientos de profesionales nórdicos, austriacos y alemanes, que vienen a vivir a España prestando desde nuestro país servicios a las empresas de sus países y en sus propios idiomas”, aporta en este punto Pablo Collantes, director de Canal para el sur de Europa en HPE Aruba. Algo esencial en un negocio en el que trabaja gente joven, que busca experiencias internacionales, “y el nuestro es un país extraordinariamente atractivo para este perfil de jóvenes ejecutivos”, apostilla aquel especialista.

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