Los centros de datos evolucionan de la mano de ProCurve Networking de HP

Adaptive Network se basa en una arquitectura de alta disponibilidad bajo los principales estándares del mercado que busca la interoperabilidad con cualquier fabricante. Por encima de esta arquitectura, plantea una infraestructura orientada a servicios bajo el prisma de la virtualización, permitiendo crear un entorno de trabajo dinámico para cada servidor virtual. Por encima de esto se encuentra la automatización, que facilita la gestión de las máquinas que soportan las aplicaciones, identificándolas y creando perfiles de red. Por último, la tercera de las capas es el control de infraestructuras, que proporciona seguridad, visibilidad y gestión del ancho de banda. “Con Adaptive Networks aportamos tecnología capaz de identificar cada máquina virtual y dotarla de los recursos que necesita para trabajar”, aclara Jorge Fernández, director técnico de HP ProCurve. En última instancia, lo que pretende es que los administradores de red recuperen el control de las infraestructuras a través de la visibilidad, la seguridad y la provisión. La visibilidad favorece la localización de las máquinas virtuales, mientras que la seguridad se relaciona con el control de tráfico de la red y la provisión se encarga del consumo del ancho de banda. 

De este modo, tal y como explica Carlos Delso, director general de HP ProCurve, “hacemos frente a los retos de los centros de datos, eficiencia energética, automatización, virtualización, consolidación y continuidad de negocio”. Además, este responsable señala que se trata de soluciones con las que se dirigen a todo tipo de empresas y a cualquier mercado vertical. “La estrategia Adaptive Networks se adapta a la transformación de los centros de datos”.