Toshiba finalizará 2005 con 150.000 portátiles vendidos
El fabricante japonés celebró ayer en Madrid la tradicional comida navideña con los medios de comunicación para mostrar su satisfacción, primero, por el año que termina, donde la compañía parece que va a alcanzar la cifra de portátiles vendidos prevista a comienzos del año y, segundo, por cómo avanza el proceso de integración de las líneas de informática y electrónica puesta en marcha, de forma pionera, en nuestro país.
Pese a no coincidir el año natural con el fiscal de la compañía, Toshiba quiso hacer balance ayer del año que termina. Con los datos del primer semestre de su ejercicio cerrado, la compañía incrementó su facturación en un 22,5 por ciento frente al año anterior, y estima que en el segundo semestre el crecimiento será del 30 por ciento, lo que les permitiría cerrar el año fiscal creciendo alrededor de un 26 por ciento para alcanzar los 230 millones de euros.
Pero lo más destacado, y así lo remarcaba Javier Pascual, presidente de la firma en nuestro país, es que se “ha consolidado la apuesta de Toshiba por los portátiles”, y prueba de ello es el reconocimiento en la corporación al hasta ahora responsable de esta área de negocio. En el caso español, esta apuesta se traducirá en unas ventas de 150.000 unidades en este 2005, según confirmó Alberto Ruano, director general de la compañía, un dato muy significativo teniendo en cuenta, además, como recordaba este responsable, que no tienen presencia en un segmento que representa un amplio porcentaje de las ventas: el consumo.
A esto ha ayudado el incremento de la eficiencia de la cadena de suministro en el mercado informático, que permite a todos los miembros de ella, tal y como indicaba Pascual, trabajar con márgenes muy ajustados, proceso al que ahora parece abocado el mercado de la electrónica de consumo que, además de ciertos problemas de suministro en estas fechas navideñas, se va a seguir viendo inmerso en una espiral de reducción de precios. Sin embargo, los responsables de la firma se mostraban más que satisfechos por cómo se está desarrollando el proceso de integración entre las dos diferentes unidades de negocio que, como recordarán, se produce en España antes de replicarse en otros países. Estos resultados se traducen, según confirmaba Javier Pascual, en “más pedidos que productos podemos vender”, un problema que, en el caso de los televisores, donde hay un elevado número de marcas compitiendo, tiene más repercusión que en el mercado informático, donde pocas marcas se reparten un altísimo porcentaje del mercado.
De todas formas, en Toshiba confían en que el próximo campeonato mundial de fútbol, del que son empresa patrocinadora, les ayude en su definitivo asentamiento en el mercado de la televisión.
Pensando en 2006, línea continuista, y es que, como indicaba Alberto Ruano, el objetivo pasa por crecer de nuevo en torno al 25 por ciento, con apuestas claras por la educación, la Administración Pública y la pequeña y mediana empresa, sin olvidar al segmento de consumo, que reconocían que seguirá tirando del carro en este nuevo año.
Pero lo más destacado, y así lo remarcaba Javier Pascual, presidente de la firma en nuestro país, es que se “ha consolidado la apuesta de Toshiba por los portátiles”, y prueba de ello es el reconocimiento en la corporación al hasta ahora responsable de esta área de negocio. En el caso español, esta apuesta se traducirá en unas ventas de 150.000 unidades en este 2005, según confirmó Alberto Ruano, director general de la compañía, un dato muy significativo teniendo en cuenta, además, como recordaba este responsable, que no tienen presencia en un segmento que representa un amplio porcentaje de las ventas: el consumo.
A esto ha ayudado el incremento de la eficiencia de la cadena de suministro en el mercado informático, que permite a todos los miembros de ella, tal y como indicaba Pascual, trabajar con márgenes muy ajustados, proceso al que ahora parece abocado el mercado de la electrónica de consumo que, además de ciertos problemas de suministro en estas fechas navideñas, se va a seguir viendo inmerso en una espiral de reducción de precios. Sin embargo, los responsables de la firma se mostraban más que satisfechos por cómo se está desarrollando el proceso de integración entre las dos diferentes unidades de negocio que, como recordarán, se produce en España antes de replicarse en otros países. Estos resultados se traducen, según confirmaba Javier Pascual, en “más pedidos que productos podemos vender”, un problema que, en el caso de los televisores, donde hay un elevado número de marcas compitiendo, tiene más repercusión que en el mercado informático, donde pocas marcas se reparten un altísimo porcentaje del mercado.
De todas formas, en Toshiba confían en que el próximo campeonato mundial de fútbol, del que son empresa patrocinadora, les ayude en su definitivo asentamiento en el mercado de la televisión.
Pensando en 2006, línea continuista, y es que, como indicaba Alberto Ruano, el objetivo pasa por crecer de nuevo en torno al 25 por ciento, con apuestas claras por la educación, la Administración Pública y la pequeña y mediana empresa, sin olvidar al segmento de consumo, que reconocían que seguirá tirando del carro en este nuevo año.
