La tecnología tiene que adaptarse e introducirse en el ámbito laboral
Una reciente encuesta de Forrester en varios países europeos señala que el 30 por ciento de los trabajadores realizaban al menos una actividad laboral sin soporte tecnológico, como, por ejemplo, pagar a través de un smartphone utilizado para el trabajo, una cifra que la consultora considera significativamente grande.
Para Forrester, las tecnologías de la información tienen que lidiar con un nuevo conjunto de tecnologías dirigidas a dar soporte a clientes y empleados, con especial hincapié en las redes sociales y la movilidad. “Las TI tienen que dominar un nuevo conunto de tecnologías, que abarcan la tecnología de marketing, la tecnología móvil, la tecnología social y la tecnología de vídeo, y aunque pueden subcontratarlo, esta es una extensión del papel de las TI”, afirma Ted Schadler, analista de Forrester.
Schadler afirma que hay un paralelismo entre el cambio que se requiere en toda la empresa para que pueda operar con éxito en la era actual, con el cambio que se produjo cuando el comercio electrónico entró en escena. Del mismo modo que actuó cuando el comercio electrónico se convirtió en dominante, las TI tendrán que coordinarse con el resto del negocio de nuevas maneras. Por ejemplo, si el departamento de marketing necesita construir una aplicación móvil, ésta saldrá del presupuesto de marketing, pero si se conecta al departamento financiero, ésta tendrá que salir del presupuesto de TI.
Poniendo otro ejemplo, Schadler apunta que las TI tendrán que trabajar con recursos humanos para formar a los empleados sobre los riesgos de la tecnología que utilizan, sobre todo si van a traer las tecnologías al lugar de trabajo. La empresa podría necesitar diseñar una política de redes sociales que describa la cantidad de información que los trabajadores pueden compartir con el mundo exterior en sitios como Twitter, por ejemplo.
