El Congreso debatirá la obligatoriedad del uso de manos libres en el coche
Aunque no se debatirá hasta septiembre, la mayoría de los grupos parlamentarios han apoyado una Propuesta no de Ley que pretende promover y generalizar el uso de los manos libres en los coches. Y es que, sólo el 23 por ciento de los automóviles tiene instalado este dispositivo.
Si atendemos a los datos facilitados por la Dirección General de Tráfico (DGT), el año pasado más de 100.00 conductores fueron sancionados por utilizar el teléfono móvil mientras conducían, un dato más que preocupante y más si se tiene en cuenta que el 38 por ciento de los accidentes mortales se deben a las distracciones al volante. Además, Alberto Gómez, director general de Parrot Iberia, destaca que “8 de cada 10 españoles reconoce llevar el móvil encendido en el coche y más de la mitad reconoce que lo utiliza de forma manual”.
Según el Presidente de la Comisión de Seguridad Vial en el Congreso, Emilio Olavaria, perteneciente al PNV, “hoy día los avances tecnológicos, gracias a la innovación del sector, permiten compatibilizar las necesidades profesionales y personales de comunicación, que no decaen al subirnos a un automóvil, con el respeto a los niveles de seguridad que dimanan de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, que en su artículo 11 explícitamente permite el desarrollo de una comunicación cuando tenga lugar sin emplear las manos, ni usar cascos, auriculares o instrumentos similares”.
En este sentido, las iniciativas que se recogen en la Propuesta no de Ley permitirán a un conductos que ha sido sancionado elegir entre pagar la multa o instalar un manos libres en su vehículo. Con esta medida, y según Parrot, “se garantiza el carácter genuino que toda multa debe de tener, que es la de erradicar la conducta que ha sido sancionada”. La propuesta también insta al Gobierno a otorgar ventajas fiscales en la adquisición de vehículos que incorporen estos dispositivos.
“La utilización de los manos libres en el automóvil reduce las distracciones al volante al evitar soltar las manos del volante para buscar el móvil, lo que redunda en una mejora de la calidad de conducción. Por ello, desde el RACE, apoyamos esta iniciativa parlamentaria, y recordar que los avances tecnológicos deben ir acompañados de una importante labor didáctica y formativa en el uso correcto, no ya del manos libres, sino del propio móvil mientras conducimos. La tecnología tiene que estar al servicio del usuario y no al revés”, señala Tomás Santa Cecilia, director de seguridad vial del RACE.
Según el Presidente de la Comisión de Seguridad Vial en el Congreso, Emilio Olavaria, perteneciente al PNV, “hoy día los avances tecnológicos, gracias a la innovación del sector, permiten compatibilizar las necesidades profesionales y personales de comunicación, que no decaen al subirnos a un automóvil, con el respeto a los niveles de seguridad que dimanan de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, que en su artículo 11 explícitamente permite el desarrollo de una comunicación cuando tenga lugar sin emplear las manos, ni usar cascos, auriculares o instrumentos similares”.
En este sentido, las iniciativas que se recogen en la Propuesta no de Ley permitirán a un conductos que ha sido sancionado elegir entre pagar la multa o instalar un manos libres en su vehículo. Con esta medida, y según Parrot, “se garantiza el carácter genuino que toda multa debe de tener, que es la de erradicar la conducta que ha sido sancionada”. La propuesta también insta al Gobierno a otorgar ventajas fiscales en la adquisición de vehículos que incorporen estos dispositivos.
“La utilización de los manos libres en el automóvil reduce las distracciones al volante al evitar soltar las manos del volante para buscar el móvil, lo que redunda en una mejora de la calidad de conducción. Por ello, desde el RACE, apoyamos esta iniciativa parlamentaria, y recordar que los avances tecnológicos deben ir acompañados de una importante labor didáctica y formativa en el uso correcto, no ya del manos libres, sino del propio móvil mientras conducimos. La tecnología tiene que estar al servicio del usuario y no al revés”, señala Tomás Santa Cecilia, director de seguridad vial del RACE.
