Intel arrastra a la baja al resto de empresas de TI
El anuncio oficial de que los resultados del tercer trimestre iban a ser inferiores a lo previsto por los analistas provocó la caída del valor de las acciones de Intel, que a día de hoy valen un 60 por ciento menos que hace un mes. El fabricante achaca sus resultados a la baja demanda de sus productos en Europa.
Intel ya ha avisado que los resultados que va a cosechar en este trimestre van a ser inferiores a lo que los expertos de la industria habían previsto. La razón, según Intel, hay que buscarla en que Europa no ha demandado tantos productos suyos como se esperaba. Así, Sean Maloney, vicepresidente y director de ventas y marketing de Intel, confirmaba que la demanda en el Viejo Continente “ha sido menor de lo previsto. Pero ello no nos va hacer cambiar nuestros planes con respecto a Europa”.
Sin embargo, este anuncio ha conllevado una cierta alarma en los mercados financieros, especialmente Nasdaq, que han reaccionado, tras el comunicado público de Intel, con una depreciación en el valor de las acciones del fabricante. De hecho, los títulos bursátiles de Intel valen en Nasdaq, a día de hoy, algo más de 45 dólares, mientras que hace un mes cotizaban a 75. Pese a que la mayor caída se produjo el viernes, (con una depreciación cifrada en el 21 por ciento), y pese a que ayer parecía que iniciaban su recuperación, al cierre de la sesión volvían a registrar un descenso hasta los 45,375 dólares por título.
La caída de las acciones de una de las compañías más importantes en la industria de Tecnologías de la Información ha provocado una reacción en cadena, arrastrando a muchos de los valores tecnológicos de este mercado. Quizá uno de los más afectados, con una caída del 12 por ciento, ha sido Dell, ya que el abanderado de la venta directa posee como único suministrador de procesadores a Intel. Sin embargo, otros fabricantes que cuentan con AMD a la hora de desarrollar sus equipos, como Compaq, también se han visto afectados por este hecho. Incluso la propia AMD ha padecido la tendencia a la baja de los mercados financieros en sus propias acciones.
Por último, cabe señalar que algunas fuentes aseguran que la escasa demanda europea no ha sido el único factor que ha motivado unos resultados de Intel inferiores a lo esperado. Así, estos analistas aseguran que este verano se han vendido pocos ordenadores en Estados Unidos, lo que ha podido resentir los números del gigante de los chips. Un extremo que, sin embargo, es negado por fabricantes como Compaq.
Sin embargo, este anuncio ha conllevado una cierta alarma en los mercados financieros, especialmente Nasdaq, que han reaccionado, tras el comunicado público de Intel, con una depreciación en el valor de las acciones del fabricante. De hecho, los títulos bursátiles de Intel valen en Nasdaq, a día de hoy, algo más de 45 dólares, mientras que hace un mes cotizaban a 75. Pese a que la mayor caída se produjo el viernes, (con una depreciación cifrada en el 21 por ciento), y pese a que ayer parecía que iniciaban su recuperación, al cierre de la sesión volvían a registrar un descenso hasta los 45,375 dólares por título.
La caída de las acciones de una de las compañías más importantes en la industria de Tecnologías de la Información ha provocado una reacción en cadena, arrastrando a muchos de los valores tecnológicos de este mercado. Quizá uno de los más afectados, con una caída del 12 por ciento, ha sido Dell, ya que el abanderado de la venta directa posee como único suministrador de procesadores a Intel. Sin embargo, otros fabricantes que cuentan con AMD a la hora de desarrollar sus equipos, como Compaq, también se han visto afectados por este hecho. Incluso la propia AMD ha padecido la tendencia a la baja de los mercados financieros en sus propias acciones.
Por último, cabe señalar que algunas fuentes aseguran que la escasa demanda europea no ha sido el único factor que ha motivado unos resultados de Intel inferiores a lo esperado. Así, estos analistas aseguran que este verano se han vendido pocos ordenadores en Estados Unidos, lo que ha podido resentir los números del gigante de los chips. Un extremo que, sin embargo, es negado por fabricantes como Compaq.
