Los 'ecommercers' calientan motores con la proximidad del Black Friday

A pesar de que el sector de ventas online y ecommerce ha crecido en forma y calidad durante los últimos años, son muchos los consumidores que aún perciben las compras online como un riesgo para sus carteras y para su privacidad. Según la última edición de Connected Life, de Kantar TNS, los consumidores españoles son cada vez más reacios a compartir sus datos personales con plataformas o herramientas digitales por culpa del gran desconocimiento sobre el destino de esa información.  

Por todo ello, All4sec, con motivo de la fecha clave que se aproxima para las ventas online, el Black Friday, quiere ofrecer una serie de consejos a tener en cuenta para generar espacios de confianza que eviten el rebote de los usuarios a la hora de comprar online.

Los datos son el primer punto que debemos de abarcar para dotar de confianza a nuestros entornos digitales. Es imprescindible ser transparentes, utilizar un lenguaje claro y evitar la letra pequeña en cuánto a términos y ajustes de privacidad.

Generar confianza en el pago electrónico. Otra de las razones por las que al final de una venta online un cliente se puede echar atrás es la desconfianza en los medios de pago electrónicos.  Para generar confianza en este sentido es importante ofrecer varios medios de pago, ya que de esta forma puede elegir aquel en el que más confía. Una vez damos varias alternativas para realizar los pagos, es imprescindible montar una pasarela de pagos segura y a la vez conseguir que el sistema esté configurado de tal manera que los controles y registro de información no agoten al usuario.

Seguridad en la autenticación del usuario. El acceso a la plataforma debe realizarse siempre autenticando al usuario, y una buena forma de mostrar seguridad es predicar con el ejemplo y no permitir el registro de usuarios con contraseñas débiles (1234 por ejemplo). Sería aconsejable forzar a que el acceso a la plataforma de ecommerce implemente verificación de contraseñas y verificación del usuario, al menos, a través de un email de confirmación.

Garantizar la protección de los datos de nuestros usuarios. De esta manera estaremos protegiendo a los clientes del ecommerce y a la propia entidad ante la posibilidad de hackeo. En este sentido, utilizar cifrado SSL (Secure Socket Layer) no es una opción, es algo imprescindible ya que permite la autentificación y la protección de la información sensible. Si además integramos EV SSL (Extended Validation Secure Sockets Layer), los clientes sabrán que están introduciendo sus datos en un sitio seguro.

Los sellos de seguridad generan confianza en el ecommerce. Es una gran idea incluir los sellos para que estén siempre visibles en todas las páginas del site. Por ejemplo en el pie o la cabecera de la web. También puede incluir enlaces obvios a la información de seguridad e información legal obligatoria para que los clientes más reticentes puedan obtener con toda la tranquilidad lo que necesitan antes de introducir sus datos de pago.