El futuro de la seguridad de la información

En este campo se ha ido avanzando, casi siempre por el ritmo marcado por los propios ataques, hasta llegar a la incipiente biometría. Esta especialización está centrada en el desarrollo de sistemas de seguridad que, mediante el análisis de un rasgo físico personal del usuario, identifican al usuario. Hay una amplia oferta de métodos biométricos, como los de escaneado de huellas digitales, escaneado del iris, escaneado de retina, análisis de escritura manual, reconocimiento de caracteres impresos manualmente y reconocimiento de la voz. Todo parece apuntar a que, en los próximos años, asistiremos a un incremento del uso de técnicas biométricas como sistema de seguridad.
Aunque en principio nos podría parecer pura ciencia ficción, a finales del año pasado Acer ya lanzó su ordenador portátil TravelMate 740 (http://www.idg.es/dealer/articulo.asp?clave=125811) que integraba el sistema de seguridad de reconocimiento por la huella dactilar para restringir el acceso a la información confidencial. Este modelo en concreto tiene un sensor dentro del propio portátil que puede ser configurado para limitar la entrada a la información que especifique el usuario.
El último fabricante en unirse a este tipo de tecnología es Oki, que acaba de anunciar el desarrollo de una unidad individual de verificación del iris, el IrisPass(R)-h. Ésta es una solución compacta que se conecta a cualquier ordenador a través de un puerto USB.
Dicha unidad permite construir diferentes sistemas de gestión de la seguridad, desde mecanismos independientes de verificación para prevenir accesos no autorizados al PC, a sistemas log-on corporativos para acceso identificando a grandes redes.