Microsoft retrasa la disponibilidad de Exchange 2000
Aludiendo cuestiones de calidad, Microsoft va a retrasar el lanzamiento de Exchange 2000 Server, por lo que su disponibilidad no será efectiva en agosto, como se pensó en un primer momento, sino que habrá que esperar hasta principios del próximo otoño.
“Nos hemos marcado unas pautas de calidad mucho más altas que las que jamás hayamos tenido con cualquier otra versión anterior de Exchange”, manifestaba Stan Sorensen, director del grupo de trabajo de aplicaciones servidor de Microsoft, quien, asimismo, aseguraba que los rendimientos en materia de calidad no acababan de satisfacer a los técnicos de la compañía, motivo por el que se ha pospuesto la disponibilidad de este producto.
Según ha confirmado este mismo directivo, una de las áreas en las que la compañía está trabajando es en el rendimiento de las conexiones en determinadas configuraciones de red. En estos momentos, cuando la configuración de una red particular trabaja de manera centralizada, a un usuario de Outlook le cuesta un par de minutos conectarse al servidor. En lo que se está trabajando es en que este proceso sea automático, según Sorensen.
Esta justificación de Microsoft en el retraso de la disponibilidad de Exchange 2000 es entendida por los analistas, quienes consideran que el asegurar la calidad es una de las principales causas por las que los fabricantes demoran el lanzamiento de sus productos. “Cada vez existe más gente que emplea Exchange, por lo que se ha convertido en una aplicación de misión crítica y, por tanto, no puede dejar de funcionar”, asegura Ian Campbell, vicepresidente de la firma Nucleus Research. Este mismo analista no considera que este retraso en la fecha de disponibilidad vaya a suponer unos efectos significativos en las ventas de Microsoft, ya que nadie “se va a sentir molesto porque le pueda perjudicar un retraso de 6 u 8 semanas en la actualización de Exchange”. Eso sí, Campbell considera que estas continuas demoras en las fechas de disponibilidad de productos, que se producen sobre todo en materia de software, ya han causado sus primeras consecuencias en la opinión de los consumidores. Éstos, cada vez más, se toman con menos entusiasmo las primeras fechas que los fabricantes hacen públicas como día en el que sus aplicaciones estarán disponibles.
Según ha confirmado este mismo directivo, una de las áreas en las que la compañía está trabajando es en el rendimiento de las conexiones en determinadas configuraciones de red. En estos momentos, cuando la configuración de una red particular trabaja de manera centralizada, a un usuario de Outlook le cuesta un par de minutos conectarse al servidor. En lo que se está trabajando es en que este proceso sea automático, según Sorensen.
Esta justificación de Microsoft en el retraso de la disponibilidad de Exchange 2000 es entendida por los analistas, quienes consideran que el asegurar la calidad es una de las principales causas por las que los fabricantes demoran el lanzamiento de sus productos. “Cada vez existe más gente que emplea Exchange, por lo que se ha convertido en una aplicación de misión crítica y, por tanto, no puede dejar de funcionar”, asegura Ian Campbell, vicepresidente de la firma Nucleus Research. Este mismo analista no considera que este retraso en la fecha de disponibilidad vaya a suponer unos efectos significativos en las ventas de Microsoft, ya que nadie “se va a sentir molesto porque le pueda perjudicar un retraso de 6 u 8 semanas en la actualización de Exchange”. Eso sí, Campbell considera que estas continuas demoras en las fechas de disponibilidad de productos, que se producen sobre todo en materia de software, ya han causado sus primeras consecuencias en la opinión de los consumidores. Éstos, cada vez más, se toman con menos entusiasmo las primeras fechas que los fabricantes hacen públicas como día en el que sus aplicaciones estarán disponibles.
