El 66 por ciento de compras on-line con tarjeta, desde equipos sin protección para ello

Con los datos del informe de Kaspersky Lab en la mano, el principal problema que ven los españoles en internet es que puedan interceptar su información financiera mientras se compra o se accede a la banca on-line (37 por ciento, tres puntos menos que la media del informe), seguido de la posibilidad de que alguien acceda a nuestro equipo sin permiso (32 por ciento), y que el equipo se infecte al abrir un archivo adjunto, que una aplicación instalada tome el control del dispositivo y comparta nuestra posición o información privada, o que alguien acceda a nuestra cuenta de correo electrónico sin nuestro permiso (29 por ciento en los tres casos). La menor de las preocupaciones de los españoles es que se instale un software no deseado tras descargar contenidos multimedia (19 por ciento), muy por debajo de que nos roben o perder el equipo (28 por ciento).

En cuanto a las preocupaciones, la principal es la pérdida de detalles bancarios (60 por ciento), seguida de cerca por la pérdida de la contraseña o detalles de la cuenta (54 por ciento) y algo más lejos por la pérdida de e-mails personales (34 por ciento) o fotos, vídeos o música creados por el propio usuario (30 por ciento). En el lado de las menores preocupaciones, encontramos la pérdida de libros electrónicos (4 por ciento), materiales de estudio o académicos (9 por ciento), software instalado en el equipo (10 por ciento), emails laborales (12 por ciento) o fotos, vídeos o música creados por otros (14 por ciento).

Asimismo, el principal problema de seguridad en internet para los españoles son los mensajes de spam en el buzón de correo electrónico (36 por ciento), recibir correo anónimo o no solicitado o mensajes de redes sociales con enlaces o ficheros adjuntos sospechosos (27 por ciento). Sin embargo, tal y como señalaba en la presentación de las nuevas soluciones de seguridad de la compañía, Kaspersky Internet Security y Kaspersky Antivirus 2013, Vicente Díaz, analista sénior de malware de Kaspersky Lab, “el 21 por ciento de los usuarios abren mensajes sospechosos pero interesantes”. En cuanto a los problemas con menor importancia para los españoles, se encuentra el recibirun mensaje de correo electrónico de su banco o de una red social pidiendo su contraseña u otros detalles (20 por ciento), la aparición de pop-ups que dicen que el equipo está infectado y recomiendan comprar un falso antivirus (21 por ciento) o que un dispositivo funcione mal o no funcione por la presencia de un virus (22 por ciento).

Y, hablando de virus, España supera en dos puntos a la media del informe (62 frente a 20 por ciento) a la hora de contar con un antivirus gratuito (sin embargo, estamos a siete puntos de Francia, donde un 69 por ciento afirma no pagar por su antivirus). Curiosamente, es la misma diferencia con la media, sólo que a la inversa, si hablamos de antivirus de pago (32 por ciento en España y 34 por ciento en la media del estudio.

Compras on-line y redes sociales

El incremento de los usuarios que realizan compras on-line ha sido constante en los últimos años. Según los datos de la encuestas, el 63 por ciento de los entrevistados afirma realizar compras de forma regular, mientras que un 57 por ciento hace uso de la banca on-line. Sin embargo, el 38 por ciento no cuenta con una solución global de seguridad.

Asimismo, mientras que un 21 por ciento afirma usar tarjetas de crédito por internet sin reparos, sólo un tercio de ellos (34 por ciento) cuenta con una solución de seguridad que permita paliar un ataque de estas características.

Y si el 15 por ciento de los sobremesa y el 16 por ciento de los portátiles no tiene ninguna solución de protección, este porcentaje se eleva sustancialmente en el caso de los dispositivos móviles.

En lo referido a redes sociales, el 60 por ciento de los encuestados se muestra reacio a proporcionar información personal en las redes sociales (56 por ciento en la media de la encuesta). De hecho, el 66 por ciento de los encuestados no haría clic en mensajes enviados desde una red social o de un remitente desconocido, y el 62 por ciento no añadiría a desconocidos en sus redes sociales. Sin embargo, sólo el 36 por ciento se preocupa por usar redes sociales.