"En el mundo digital la competencia ha cambiado y la regulación tiene que evolucionar", César Alierta

“La digitalización de la economía es un factor clave para ganar en competitividad e impulsar el crecimiento y abre enormes oportunidades para las personas y para todos los sectores”. Con estas palabras, César Alierta, presidente de Telefónica, comenzaba su exposición sobre la situación de las TIC en España en 2014, un año en el que, según el informe La Sociedad de la Información 2014, se avanzó. A pesar del desarrollo, César Alierta instó a convertir en una prioridad el “favorecer el avance de la Sociedad de la Información”.

Análisis de 2014

El tráfico de la banda ancha móvil, “que se incrementó en un 50 por ciento en el último año”, y el número de usuarios, “que creció en más de un 20 por ciento”, fueron dos de los hechos destacables que ocurrieron en 2014, al igual que el “gran avance que se ha producido en las infraestructuras de banda ancha móvil y fija, particularmente en fibra óptica” algo que, en opinión de César Alierta, “ha repercutido de forma muy importante en la creación de empleo”.

El presidente de Telefónica recordó que las aspiraciones de los usuarios se centran ya no sólo en “disponer de una velocidad de conexión más rápida” sino en “estar conectados en todo momento y desde cualquier lugar, con un ancho de banda suficiente”. Esto implica  asumir “el reto de ofrecer servicios de forma integrada a todos los clientes”.

La consolidación del sector de las telecomunicaciones, con las compras de ONO por Vodafone, Jazztel por Orange o e-Plus por Telefónica Deustchland, fue otro de los grandes acontecimiento de 2014, un año en el que “el uso del vídeo creció considerablemente” gracias al incremento de la penetración  de los televisores inteligentes en  hogares (34 por ciento) o el uso de paquetes convergentes “que se ha multiplicado por cuatro”. La mensajería instantánea continuó creciendo y “ya es utilizada por el 78 por ciento de todas las personas”.

En este sentido, César Alierta destacó “el liderazgo de España en el contexto europeo del uso de smartphones, que supone ya el 81 por ciento de todos los móviles, y en la educación digital, tanto por el uso de tecnología en los colegios como la impartición de cursos masivos a través de la Red”.

En cuanto a las empresas “la tecnología sigue planteando nuevos desarrollos en I+D y sólo 1 de cada 4 empresas considera que la infraestructura tecnológica que tiene es suficiente para abordar su futuro”. Eso sí, recordó que las empresas “tienen que hacer frente a los problemas de seguridad”.

Internet de las Cosas continuó su avance en 2014 “aunque en la actualidad sólo el 1 por ciento de los objetos físicos está conectado”. El potencial de Internet de las Cosas es “enorme” más si se tiene en cuenta que se cree que en 2020 “habrá más de 50.000 millones de dispositivos conectados en todo el mundo”.

Cambios en la regulación

César Alierta recordó que en el mundo digital “la competencia ha cambiado” algo que le llevó a solicitar un cambio en la regulación para que “las reglas del juego apliquen por igual a todas las empresas que operan en el mundo digital”.

En el caso de Europa, el presidente de Telefónica demandó un avance en “la definición de un marco normativo estable y adecuado que favorezca el despliegue de las redes de nueva generación para poder afrontar con éxito la evolución hacia la nueva economía digital y recuperar el liderazgo que tenía Europa y que perdimos hace unos años”. Si no se avanza, Europa no será competitiva, ya que “la digitalización es clave para mejorar la competitividad”. Una de las claves en este sentido es “la inversión en software y bases de datos, algo que en Europa estamos rezagados”. A la hora de realizar esta afirmación César Alierta se basó en el hecho de que en Estados Unidos la inversión en software, bases de datos y sistemas digitales en activos físicos “es de dos veces mientras que en Europa es de 0,8”.

Asimismo, César Alierta señaló a la creación de “una experiencia de Internet abierta y segura para todos” como básica, y no se conseguirá si no se gana “una confianza digital, a través de una experiencia de Internet más segura para todos, creando una vida digital, abriendo claramente los sistemas operativos y las plataformas digitales y fomentando una agenda abierta para el futuro digital. Estos desafíos afectan a la transparencia, privacidad y seguridad”.