Obama califica de "vandalismo cibernético" el ciberataque a Sony
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha calificado el ataque que ha sufrido Sony de vandalismo cibernético. Los expertos consideran que con esta declaración Obama busca evitar un conflicto con Corea del Norte, a quien se le ha señalado como responsable.
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Para Barack Obama, presidente de Estados Unidos, el ataque que sufrió Sony y que tuvo como consecuencia el robo de toda la información que contenía en su red, fue vandalismo cibernético y no un acto de guerra. Así lo publica Reuters que asegura que con esta declaración Barack Obama busca evitar un conflicto con Corea del Norte.
Barack Obama aseguró, además, que este acto ha tenido consecuencias “muy costosas” y ha confirmado que el Gobierno de Estados Unidos está analizando el ataque con el fin de responder “de manera proporcionada”. Entre las medidas que podría adoptar Estados Unidos se encuentra el retorno de Corea del Norte a la lista de naciones que apoyan el terrorismo de la que salió hace seis años.
Corea del Norte, por su parte, ha negado tener cualquier implicación con el ciberataque a Sony y ha amenazado a Estados Unidos con una guerra. “Nuestro más duro contraataque se dirigirá a la Casa Blanca, el Pentágono y todo el territorio continental de Estados Unidos superando con creces el contraataque simétrico declarado por Obama", afirma el Gobierno de Corea del Norte en un comunicado.
China, por su parte y según Reuters, ha condenado el ataque ha Sony aunque ha asegurado que no hay ninguna prueba que haga pensar que Corea del Norte está detrás del ataque.
En la lista de peores brechas de seguridad de 2014, Sony se sitúa en un lugar más que destacado. La multinacional japonesa sufrió un robo de información que ha afectado a más de 47.000 actores, autónomos, empleados y ex empleados de la firma. Los hackers que consiguieron acceder a los sistemas de Sony Pictures Entertaiment, se hicieron con el control de toda la información que guardaba Sony en sus sistemas y publicaron películas que estaban pendientes de estreno, mensajes de correo electrónico de los dirigentes e información que afectaba a varios actores y actrices como fue el caso de Leonardo DiCaprio.