Toshiba factura un 2 por ciento menos pese a vender 115.000 portátiles más

A esto hay que añadir algunas dificultades de entrega de producto en Navidad, que se resolvieron en parte en el primer trimestre del año, así como el retraso para el siguiente trimestre de la entrega de los productos de algún concurso público, lo que lleva a Alberto Ruano, director general de la compañía en nuestro país, a mostrarse satisfecho con unos resultados que, pese a todo, permiten a Toshiba mantener una situación muy positiva frente a la totalidad del mercado.

El Efecto Netbook ha sido muy importante, y más si tenemos en cuenta que la propia Toshiba ha comercializado más de 53.000 unidades. Su bajo precio y el posicionamiento incorrecto como sustituto del portátil en algún caso, han llevado a este tipo de producto a canibalizar las ventas de portátiles, sobre todo en el segmento retail.

Así las cosas, para el año que ahora comienzan la estrategia va a ser similar, esto es, apostar por la calidad y la rentabilidad, manteniendo si no mejorando sus posiciones en Administración Pública, segmento profesional y enEducación, donde la firma presume de haber colocado este año más de 80.000 portátiles y que representa el 20 por ciento de la cifra global de Toshiba en España. En número, de este nuevo ejercicio se espera un incremento del 20 por ciento en unidades manteniendo un nivel de facturación similar al de este ejercicio, que se ha situado en 357 millones de euros.

Por unidades de negocio, informática repartió sus ventas al 50 por ciento entre corporativo y retail, y supone un 80 por ciento de la facturación global de Toshiba, mientras que los televisores alcanzan ya el 15 por ciento y la división de accesorios un 5 por ciento, tras crecer un 161 por ciento este año.