La evolución de la informática móvil: algunas alternativas para los distribuidores
Todos los que llevamos algunos años en la industria informática hemos oído innumerables veces hablar del boom que va a vivir la informática móvil, y que los crecimientos van a equiparar prácticamente las ventas de notebooks con las de los equipos de sobremesa. Nada más lejos de la realidad. Año tras año observamos como la industria portátil obtiene crecimientos que podemos catalogar de significativos, pero ni mucho menos son espectaculares. Las causas para esta situación no son fáciles de desentrañar, aunque el alto precio de los equipos desempeña un papel más que significativo.
Otro tema a tener en cuenta, sobre todo bajo el constante prisma de buscar la especialización del dealer, es que la industria móvil sí ofrece algunas alternativas que son importantes y que no deben ser menospreciadas por los distribuidores. El portátil, vendido como una máquina de hardware más, ofrece unos márgenes de beneficio tan exiguos como los que pueda ofrecer un equipo de sobremesa, pero si a la informática móvil le sumamos los desarrollos propios del distribuidor y el valor añadido, podemos estar ante un negocio atractivo: la automatización e informatización de las redes de ventas propias de las empresas españolas, independientemente del tamaño de éstas.
Algunas cifras a tener en cuenta
La importancia de la informática móvil respecto a su hermana mayor, los equipos de sobremesa, es más que cuestionable, aunque la tendencia es permanentemente al alza.
Según CB Consulting, durante 1995 se vendieron en España algo más de 80.000 portátiles, lo que respecto al año anterior significó un crecimiento del 15 por ciento. El porcentaje respecto a los equipos de sobremesa sigue siendo pequeño, un 12 por ciento del mercado, comparado con las cifras que se mueven, por ejemplo, en el mercado americano, donde una cuarta parte de los equipos que se ponen a disposición del mercado son portátiles.
Esta baja penetración del portátil en el mercado español tiene como principal inductor el tema del precio, y es que un equipo móvil tiene un coste superior en tres veces al de un equipo de sobremesa de idénticas características. Este alto precio es el que hace que el único cliente potencial de los equipos móviles sean las grandes cuentas. El mercado de consumo no adquiere, en líneas generales, equipos portátiles ya que el lugar donde desempeñan su trabajo no es itinerante, con lo que un sobremesa resuelve perfectamente sus necesidades. El único motivo que origina la compra de un notebook es la necesidad de trabajar en cualquier sitio, y ese es el único motivo que justifica el coste de dicha tecnología.
Las buenas expectativas de los portátiles son, sin embargo, algo claro para la mayor parte de los analistas del sector informático y las razones son también variadas. Se anuncia, por una parte, un drástico descenso de los precios que afectan hoy en día a la informática móvil. Un segundo motivo, y quizá el más importante, es la enorme importancia que el mundo de las comunicaciones, en especial Internet, está adquiriendo para el usuario de informática. Dice el dicho que la información es poder, e Internet es información. Si este axioma se cumple está claro que no sólo será necesario acceder a Internet, sino que además ese acceso tiene que producirse en cualquier momento y desde cualquier lugar. El portátil, por lo tanto, se va a convertir en un centro de comunicaciones móvil, y de que logre alcanzar esa categoría depende gran parte de su futuro.
Este tema de las comunicaciones es más que significativo, y prueba de ello es que, según la consultora Meta Group, la proliferación de las comunicaciones va a "resucitar" un tipo de producto que nació con grandes expectativas, pero que no ha sido capaz de cumplirlas en el mercado, los PDA. Según Meta Group, aspectos como los problemas de las aplicaciones de reconocimiento óptico de caracteres, y los de los dispositivos de comunicaciones que deberían permitir la transmisión de estos datos desde el PDA hasta el equipo de sobremesa, han sido los elementos que han desencadenado el aletargamiento del mercado de asistentes personales digitales. Pero, las compañías del sector informático están utilizando el software y el hardware propio de los PDA para el desarrollo de aplicaciones para Internet.
El futuro parece, por lo tanto, bastante prometedor ya que las empresas están incrementando el ritmo de compra de informática móvil, y el mundo de las comunicaciones va a obligar a que informática móvil y telefonía móvil converjan cada vez más. Prueba de esta convergencia son los últimos anuncios de compañías como Toshiba o Nokia. En el primero de estos casos, el fabricante nipón ha presentado al mercado español el portátil Tecra 720 CDT (ver sección Nuevos Productos de este mismo número) que, entre otras características, viene a esbozar la estrategia de esta compañía en cuanto a que la evolución de la informática móvil va a ir ligada al crecimiento del GSM. Prueba de ello es que el Tecra 720 CDT no sólo dispone de un módem de 28.800 bps, sino que dispone de funciones como contestador automático con micrófono incorporado, posibilidad de discriminar llamadas de fax o de voz, e incluso dispone de un conector mediante el cual el portátil se conecta a una roseta y puede actuar como un teléfono. El único problema para la potenciación de estos servicios es que la administración española sea capaz de acelerar los procesos por los que un fabricante obtiene la certificación necesaria para vender estos productos.
En cuanto a Nokia Mobile Phones (ver también la sección de Nuevos Productos), esta compañía ha dado un paso en el camino que acerca definitivamente el mundo del ordenador personal con el de la telefonía móvil al presentar al mercado el Nokia 9000 Communicator. Este equipo se presenta como un híbrido entre un teléfono móvil GSM y un organizador personal basado en un procesador 386 de Intel. Con un precio que rondará las 200.000 ptas., este dispositivo se caracteriza por adentrase en el concepto de "oficina móvil de bolsillo" y ofrece al usuario las características propias de una agenda electrónica (calendario, agenda personal, reloj, base de datos telefónica, calculadora, etc.) y las propias de la telefonía móvil (envío y recepción de faxes, correo electrónico, acceso a Internet y otras redes públicas y privadas, servicio de mensajes cortos, etc.).
Nuevas tecnologías para portátiles
El mundo de los PC portátiles está sufriendo avances vertiginosos, de forma que estas máquinas no tienen prácticamente nada que envidiar a sus compañeros de sobremesa. Actualmente están en fase de desarrollo, o ya comercializadas, diversas tecnologías que van a incrementar aún más el rendimiento de este tipo de ordenadores.
Primero ya están disponibles pantallas TFT que soportan resoluciones de hasta 800 por 600 pixeles con más de 16 millones de colores simultáneos en pantalla. Además, poco a poco, se aumenta el tamaño de este tipo de pantallas, encontrándose en su última fase de desarrollo modelos con algo más de 12 pulgadas. Quizás, con el paso del tiempo, las pantallas TFT incluso lleguen a sustituir a los monitores que hoy en día usan los ordenadores de sobremesa.
Otra de las tendencias importantes es la incorporación al mundo de los equipos notebooks de más y más tecnologías multimedia. Si bien hoy en día casi todos estos equipos disponen de una tarjeta de sonido integrada no ocurre lo mismo con otras tecnologías, como es el caso de la descompresión de vídeo MPEG mediante hardware. Además, la decodificación de secuencias comprimidas en formato MPEG requiere, si no se dispone de hardware especializado, de un procesador rápido. Para solucionar este problema Toshiba, por ejemplo, ha creado la tecnología ZV. Se trata de una técnica mediante la cual los datos de la secuencia de vídeo comprimida pasan directamente del medio de almacenamiento (CD-ROM, disco duro, etc) a
