Asimelec defiende la aplicación de un canon digital justo y sostenible
El próximo 25 de marzo, el Gobierno tendrá que emitir una resolución acerca de la aplicación del canon digital. Antes de esa fecha, Asimelec ha encargado a Sigmados la elaboración de un estudio en el que se muestre los hábitos de uso de los dispositivos electrónicos y soportes digitales en los hogares españoles. De este informe se sacan importantes conclusiones: el canon es abusivo en comparación con el perjuicio que las sociedades de gestión denuncian.
“Las sociedades de gestión pretenden aplicar un canon que equivaldría a suponer que todos los dispositivos son usados únicamente para realizar copias privadas de música y película, presuponiendo, además, que cada copia realizada equivale a un CD o DVD original no vendido, lo cual dista mucho de la realidad”. Con estas palabras, José Pérez, director general de Asimelec, presentaba el estudio realizado por Sigmados, del que se desprenden importantes conclusiones.
La primera de ellas es que “los CD y DVD vírgenes son los dispositivos más utilizados por los consumidores, y sobre los que ya se está aplicando un canon, desde 2003, que supone el 60 por ciento del PVP. Este desmesurado precio ha supuesto la creación de un mercado negro que ha provocado el derrumbe de esta industria, en España y en Europa”, destacó José Pérez.
La solución, para los responsables de Asimelec, sería “la aplicación de un canon inferior al 5 por ciento. Éste seria aceptable, ya que las entidades de gestión recaudarían el importe ocasionado por la piratería y sería neutro para el mercado”. Además, José Pérez también aprovechó la ocasión para recordar que “si se aplicara un canon sostenible y justo se evitaría el fraude”.
Si volvemos a los datos del estudio, cabe señalar que éste afirma que el 38,7 por ciento de los hogares españoles utiliza CD vírgenes para copiar música, mientras que el 44,6 por ciento son destinados al almacenamiento de archivos y fotografías, entre otros. En el caso de DVD-R, el 45,2 por ciento se utiliza para grabar películas y, sobre el total del mercado, sólo el 26,5 de los DVD vírgenes son destinados a realizar copias privadas (un 20,8 por ciento si de lo que hablamos es de CD). “Estos datos contrastan los emitidos por las entidades de gestión y el Gobierno, que defienden la aplicación del canon digital en el hecho de que los españoles utilizan CD y DVD únicamente para grabar películas y música”.
Pero el canon no afecta únicamente a CD y DVD. Los teléfonos móviles con reproductores multimedia también están sujetos al canon. Según el estudio el 72,1 por ciento de los usuarios de este tipo de dispositivos no usa la función multimedia, “con lo que no tiene sentido aplicar el canon, máxime cuando la ley especifica que no se debe compensar el perjuicio considerado como mínimo”, puntualizó el director general de Asimelec.
Especialmente significativo es el caso de las tarjetas de memoria de cámaras digitales. El 99,1 por ciento de los usuarios utiliza la memoria únicamente para almacenar las fotografías que realiza con sus cámaras. “Siempre hemos defendido el respeto a los derechos del colectivo de autores, y creo que de eso nadie tiene duda, pero también hay que respetar los intereses de consumidores y profesionales que hacen uso legal y variado de las múltiples aplicaciones de los dispositivos y soportes electrónicos”, finalizó José Pérez.
La primera de ellas es que “los CD y DVD vírgenes son los dispositivos más utilizados por los consumidores, y sobre los que ya se está aplicando un canon, desde 2003, que supone el 60 por ciento del PVP. Este desmesurado precio ha supuesto la creación de un mercado negro que ha provocado el derrumbe de esta industria, en España y en Europa”, destacó José Pérez.
La solución, para los responsables de Asimelec, sería “la aplicación de un canon inferior al 5 por ciento. Éste seria aceptable, ya que las entidades de gestión recaudarían el importe ocasionado por la piratería y sería neutro para el mercado”. Además, José Pérez también aprovechó la ocasión para recordar que “si se aplicara un canon sostenible y justo se evitaría el fraude”.
Si volvemos a los datos del estudio, cabe señalar que éste afirma que el 38,7 por ciento de los hogares españoles utiliza CD vírgenes para copiar música, mientras que el 44,6 por ciento son destinados al almacenamiento de archivos y fotografías, entre otros. En el caso de DVD-R, el 45,2 por ciento se utiliza para grabar películas y, sobre el total del mercado, sólo el 26,5 de los DVD vírgenes son destinados a realizar copias privadas (un 20,8 por ciento si de lo que hablamos es de CD). “Estos datos contrastan los emitidos por las entidades de gestión y el Gobierno, que defienden la aplicación del canon digital en el hecho de que los españoles utilizan CD y DVD únicamente para grabar películas y música”.
Pero el canon no afecta únicamente a CD y DVD. Los teléfonos móviles con reproductores multimedia también están sujetos al canon. Según el estudio el 72,1 por ciento de los usuarios de este tipo de dispositivos no usa la función multimedia, “con lo que no tiene sentido aplicar el canon, máxime cuando la ley especifica que no se debe compensar el perjuicio considerado como mínimo”, puntualizó el director general de Asimelec.
Especialmente significativo es el caso de las tarjetas de memoria de cámaras digitales. El 99,1 por ciento de los usuarios utiliza la memoria únicamente para almacenar las fotografías que realiza con sus cámaras. “Siempre hemos defendido el respeto a los derechos del colectivo de autores, y creo que de eso nadie tiene duda, pero también hay que respetar los intereses de consumidores y profesionales que hacen uso legal y variado de las múltiples aplicaciones de los dispositivos y soportes electrónicos”, finalizó José Pérez.
