¿Cuál es el papel de las TIC en el aprendizaje?
Los jóvenes ya construyen su futuro a través de las nuevas redes culturales. Ésta es la principal conclusión de un estudio presentado por la Fundación Telefónica el cual señala que tanto los jóvenes españoles como los latinoamericanos "ensayan ya nuevas dinámicas de aprendizaje".
Titulado “Estrategias creativas y redes culturales de los jóvenes en el marco de la educación y el desarrollo”, éste se trata de un estudio etnográfico sobre los nuevos hábitos creativos y de ocio de los jóvenes de España y Latinoamérica.
Una de las principales conclusiones del informe es que “tanto los jóvenes españoles como los latinoamericanos se están formando para la vida no sólo de forma formal o reglada, sino informal: innovación, desarrollo de estrategias creativas, redes culturales, interactividad entre el arte, la educación y el aprendizaje, nuevas dinámicas de producción, difusión y consumo cultural, usos no convencionales de espacios públicos, o autogeneración de empleo”, reza el informe.
De hecho, y según palabras de Néstor García Canclini, co-autor del estudio, asegura que “suele suceder que son los alumnos los que enseñan a los maestros y que los aprendizajes que se logran en la Red se apoyan en otros provenientes de la vida cultural en las grandes ciudades”.
Por su parte, el profesor de la UNED Francisco Cruces, responsable de coordinar el estudio en España, ha señalado que “debemos descartar la imagen de la tecnología como simple tornillería, ya que estamos asistiendo a nuevas sensibilidades, lenguajes y formas de relación. De hecho, en España mucha gente mayor ha aprendido muchas cosas a través de los hijos”.
Maritza Arteaga, profesora de la Universidad Autónoma Metropolitana de México, ha destacado que hay tecnologías que provocan ciertos tipos de comportamiento. “Hemos de ser conscientes de que estamos viviendo más las imágenes que el texto y la palabra”, ha afirmado. Según Arteaga, esas diferencias con generaciones anteriores se acentúan “por la falta de autoridad de los padres, a los que están supliendo las TIC, que son las que impulsan nuevos nichos de empleo, potencialidad de nuevas experiencias e imbricación de conocimientos antiguos o formales con informales. El verdadero reto para nosotros es entrar en los mundos virtuales a través de la etnografía, cómo se usan las TIC no sólo en el ámbito del ocio, sino en el del trabajo y los procesos formales e informales”.
Una de las principales conclusiones del informe es que “tanto los jóvenes españoles como los latinoamericanos se están formando para la vida no sólo de forma formal o reglada, sino informal: innovación, desarrollo de estrategias creativas, redes culturales, interactividad entre el arte, la educación y el aprendizaje, nuevas dinámicas de producción, difusión y consumo cultural, usos no convencionales de espacios públicos, o autogeneración de empleo”, reza el informe.
De hecho, y según palabras de Néstor García Canclini, co-autor del estudio, asegura que “suele suceder que son los alumnos los que enseñan a los maestros y que los aprendizajes que se logran en la Red se apoyan en otros provenientes de la vida cultural en las grandes ciudades”.
Por su parte, el profesor de la UNED Francisco Cruces, responsable de coordinar el estudio en España, ha señalado que “debemos descartar la imagen de la tecnología como simple tornillería, ya que estamos asistiendo a nuevas sensibilidades, lenguajes y formas de relación. De hecho, en España mucha gente mayor ha aprendido muchas cosas a través de los hijos”.
Maritza Arteaga, profesora de la Universidad Autónoma Metropolitana de México, ha destacado que hay tecnologías que provocan ciertos tipos de comportamiento. “Hemos de ser conscientes de que estamos viviendo más las imágenes que el texto y la palabra”, ha afirmado. Según Arteaga, esas diferencias con generaciones anteriores se acentúan “por la falta de autoridad de los padres, a los que están supliendo las TIC, que son las que impulsan nuevos nichos de empleo, potencialidad de nuevas experiencias e imbricación de conocimientos antiguos o formales con informales. El verdadero reto para nosotros es entrar en los mundos virtuales a través de la etnografía, cómo se usan las TIC no sólo en el ámbito del ocio, sino en el del trabajo y los procesos formales e informales”.
