Intel arranca el año con un crecimiento de ingresos plano

Hace unas semanas, el descenso de la demanda de PC llevó a Intel a revisar a la baja sus previsiones de ingresos para el primer trimestre del año. Estas previsiones se han cumplido, ya que la compañía ha reportado unas ventas de 12.800 millones de dólares, la misma cifra que la cosechada en el primer trimestre de 2014. Los beneficios de explotación ascendieron a 2.600 millones de dólares, un 4 por ciento más comparado con los 2.500 millones obtenidos en el mismo trimestre del pasado año, mientras que los beneficios netos también aumentaron un 3 por ciento hasta los 2.000 millones. Las ganancias por acción fueron de 41 centavos de dólar, frente a los 38 centavos por dólar de un año antes.

Por divisiones de negocio, los ingresos del Client Computing Group han ascendido a 7.400 millones de dólares, lo que representa una disminución anual del 8 por ciento. Mejores resultados se han registrado en el Data Center Group y en el Internet of Things (IoT) Group, que experimentaron sendos crecimientos del 19 por ciento y del 11 por ciento, respectivamente.

Como explica Brian Krzanich, consejero delegado de Intel, “los ingresos no han mostrado ninguna variación interanual, al haberse visto compensada la demanda de PC de sobremesa para empresas, más reducida de lo esperado, con el crecimiento de más del 10 por ciento que han experimentado los ingresos en las divisiones de centro de datos, de memoria y del Internet de las Cosas. Estos resultados subrayan la importancia de continuar con nuestra estrategia de crecimiento”.

De cara a lo que resta del año, Krzanich prevé que el mercado de PC caerá un dígito pese a la esperada llegada de Windows 10 este verano. Como resultado, Intel ha reajustado sus previsiones de ventas para 2015, en el que espera que su volumen de ingresos registre un crecimiento plano, alcanzando los 55.900 millones de dólares.